Javier Batlle.- El filósofo valenciano Miguel Catalán presenta con esta la séptima entrega de su Seudología, tratado general del uso de la mentira en las sociedades humanas. Después de haber tratado el aspecto ético del engaño en el volumen sexto, Ética de la verdad y de la mentira, en esta ocasión focaliza su análisis en las falsedades inherentes a la acción política, ya sea para encubrir el oscuro y abusivo origen de todo poder o bien para justificar su contumaz resistencia a variar el "orden establecido" a la medida de su interés.
Un estudio por cierto que, leído entre los bastidores de la España de los últimos siglos, desvela también un escenario sin duda cambiante pero donde los distintos actores parecen representar siempre la misma obra...
No dejen de leer al respecto el revolcón que nuestro autor propina al gran intérprete de la España contemporánea, don José Ortega y Gasset. Ya tocaba que alguien desnudara al filósofo-rey de las esencias patrias... y sus molestas conllevancias.
Dicho lo cual, es obligado presentar ya al hombre detrás del nombre: Miguel Catalán, filósofo de vocación y profesión, y sobre todo infatigable rastreador del saber... y ante todo su sombra, la mentira (o la falsedad interesada), tras comprender un día, hace ya muchos años, que el camino hacia la verdad necesita ser continuamente despejado, cuando no despojado, de los engaños que lo bloquean e impiden el avance a su través.
Lo cual obliga a Catalán a actuar en este volumen, como en el conjunto de su obra seudológica, con la libertad que solo conoce el outsider, el estudioso ajeno a toda línea establecida de pensamiento o encorsetada actitud moral, tan corriente en estos corrientes tiempos. Desde luego, su actitud ante el conocimiento es más parecida a la del cowboy de rodeo que resiste las embestidas de un toro al que no pretende domesticar que a la del jinete de un bien adiestrado cartujano vienés.
Solo con ese espíritu libre (y erudito) puede adentrarse nadie en el vasto territorio de las falsas apariencias por excelencia, el escenario político, en estos tiempos en los que quienes sospechan de algo son ya sospechosos de todo. Porque hoy es políticamente incorrecto dudar de los fundamentos de los regímenes democráticos, como si los Estados de Derecho fuesen químicamente puros y virtuosos. La mentira es perseguida y se castiga electoralmente, claro, pero no se comprende como mal sistémico, sino como vicio personal.
Y el problema reside en que el sistema se asienta igualmente en poderes fraudulentos, como lo son todos, como lo fueron siempre, cuando no sobre los escombros de monarquías o dictaduras nunca vencidas ni juzgadas ni menos aún condenadas.
Para nuestra sorpresa, este honrado y humilde intelectual señala, sin que le tiemble el pulso, una línea de continuidad en el ejercicio del poder y el gobierno del pueblo desde el mismo origen de los tiempos históricos.
Extraigo a modo de muestra para el lector curioso algunas frases de esta brillante y valiente obra:
"Desde que los primeros reyes fueron aclamados por la superchería litúrgica de los magos, la relación intrínseca entre la mentira y el gobierno no ha hecho sino prosperar hasta el día de hoy."
"El momento clave para nuestros intereses seudológicos comienza cuando en el Neolítico se vuelve más rentable esclavizar a los enemigos derrotados que matarlos."
"El robo, que es el recurso más rentable que conocemos para ahorrarse las penalidades del trabajo, figura en la base de los tesoros reales."
"La mentira no es endémica solo en los regímenes autocráticos, sino en todo sistema político, incluyendo el democrático."
"El papel de la mentira en política adquiere su verdadera importancia con la aparición del Estado y la consiguiente división social en dos clases: la superior y la inferior."
"La servidumbre vitalicia de los trabajadores en la plutocracia global contemporánea no es muy distinta a la de las plutocracias locales de hace mil años."
"La principal causa de la mentira política es la injusticia inherente a la desigualdad social producida por la historia" (y, añadiría yo: y productora de la historia).
Y es que, desde que existen sociedades, unos mandan y otros obedecen, unos extraen los recursos que otros producen, unos dictan las leyes y otros las acatan. Y esa es la única historia que hemos conocido. Al final, para el asombrado lector, resulta que todo es exactamente como sospechaba: una monumental superchería. Por eso en España está permitido encarcelar a demócratas sin sentencia judicial... pero no juzgar a los franquistas confesos.
En fin, se diría que la única verdad absoluta en política es la absoluta falta de verdad. Aunque también es posible que entre la España y la Suecia actuales, por ejemplo, haya algo más que un simple registrador de la propiedad. Ustedes me entienden.
Miguel Catalán. Mentira y poder político. Verbum, Madrid, 2018.
EL LIBRO COMO ALTAR PORTÁTIL
Que la nuestra sea una época que le ha dado la espalda a los libros (a despecho de que, gracias a la impresión digital bajo demanda, hoy se publican más títulos que nunca: en España, más de ¡80.000! cada año) acrecienta nuestro estupor ante lo que significaron, en términos no sólo de conocimiento, sino ante todo vivenciales, para las personas de otros tiempos. Pasma saber que, para ellas, poseer un libro, aunque se tratase de un humilde devocionario en el que se recogieran las oraciones que se debían entonar todos los días, lejos de significar una práctica mundana, incluso banal, se revestía de una auténtica dimensión mística, trascendente. Es por ello que, en cierta ocasión, he llegado a hablar del libro como altar portátil.
ROBERTO JUARROZ:Que la nuestra sea una época que le ha dado la espalda a los libros (a despecho de que, gracias a la impresión digital bajo demanda, hoy se publican más títulos que nunca: en España, más de ¡80.000! cada año) acrecienta nuestro estupor ante lo que significaron, en términos no sólo de conocimiento, sino ante todo vivenciales, para las personas de otros tiempos. Pasma saber que, para ellas, poseer un libro, aunque se tratase de un humilde devocionario en el que se recogieran las oraciones que se debían entonar todos los días, lejos de significar una práctica mundana, incluso banal, se revestía de una auténtica dimensión mística, trascendente. Es por ello que, en cierta ocasión, he llegado a hablar del libro como altar portátil.
LA CREACIÓN DE UNA NUEVA PALABRA
El poeta argentino Roberto Juarroz (Coronel Dorrego,1925, Temperley, Buenos Aires,1995) constituye un ejemplo perfecto de escritor autoconsciente de sí mismo y de la tarea acometida en su obra, hasta el punto de que, excepto algunos, no muchos, poemas, el grueso de su producción se agrupa bajo el título “Poesía Vertical”, formada por trece volúmenes publicados en vida, más otro último, póstumo, y algunos poemas posteriores sueltos. Así, esa única obra, desplegada en sucesivas entregas, como ramas salidas de un único tronco y de una sola tierra nutricia, puede entenderse como una sucesiva profundización de unos pocos temas que la recorren y vertebran por entero, o quizá mejor dicho, de uno solo, con varios rostros: el sentido de la creación poética; la función del poeta y su palabra; la posibilidad de una experiencia poética omnicomprensiva de la Realidad. LEER MÁS
LA INSINCERA PLEITESÍA DEL DEMAGOGO
El Manual del demagogo, de Raoul Frary, en las alas de su estilo brillante y lleno de contraposiciones, plantea un agudo estudio psicológico de la conducción política de multitudes. En todo sistema político basado en la opinión pública, parece decirnos su autor, el político debe conducir al pueblo no adonde aquel juzga que debería ir, sino adonde este desea ser llevado. Tal suerte de pleitesía insincera sería la marca del demagogo, empeñado menos en lograr el bien de la comunidad que en mantener su ventaja personal. LEER MÁS
LA POESÍA CUÁNTICA DE BASARAB NICOLESCU
En este denso y atento análisis de los Teoremas poéticos del físico rumano, se define al ser humano como un buscador del sentido profundo por debajo de la apariencia contradictoria de la presencia-ausencia de las cosas. Y es que no es sino en la experiencia interior donde el sentido nace. De esta forma, los poetas, “que usan las palabras como objeto de investigación de lo que está más allá de las palabras”, serían los “físicos del sentido”, aquellos que se mueven en el ámbito omniabarcante de la lógica ternaria del tercero incluido. LEER MÁS
ADIÓS A LAS LIBRERÍAS
Decenas, cientos de autores de referencia, cuya solvencia está fuera de toda duda, no encuentran acomodo en las librerías del siglo XXI. Sin embargo, miles de alfeñiques literarios acaparan toda la atención de unos lectores que, eso sí, se verán a sí mismos como detentores de una alta capacidad crítica, pues... ¡están al día! La actualidad lo devora todo en el altar del instante; no hay tiempo para emplear lo que se lee en madurar un pensamiento propio, en entablar una relación dialéctica con lo leído: hay que leer mucho y rápido, opinar a bote pronto y pasar a toda velocidad al próximo título, ¡la farsa debe continuar! LEER MÁS
KAFKA: LA CONDENA DE SER ACUSADO
En un sentido profundo, el dedo que acusó forma parte de la mano que castiga. O, dicho a la inversa, el índice que aprieta el gatillo es el mismo que antes señaló la pieza. El vínculo entre la hostilidad de la acusación, la vergüenza que siente el señalado, el sentimiento íntimo de culpa y el castigo exterior ha sido expuesto por Franz Kafka a la cruda luz de su escritorio. El nexo que advirtió Kafka entre la acusación y la condena se reduce al más simple de los enunciados posibles: la condena consiste en la acusación. Esa equiparación entre acusación pública y condena revela el significado social de la acción de acusar en voz alta o por escrito que cualquier grupo emprende contra uno de sus miembros. LEER MÁS
LA ESCRITURA CONTRA LA LECTURA
Leon Tolstoi, en sus diarios, especulaba con la perspectiva de no publicar nada en vida, asumiendo que el texto verdaderamente valioso es aquel que se propone, activamente, no ser leído. Y es que, si uno escribe, es porque ha renunciado ‒ni que sea mientras escribe‒ a hablar, no sólo porque no encuentra interlocutor, sino porque inconscientemente lo aleja. Sí, aunque no lo sepamos, escribimos, no para acercar(nos) a los demás, sino para mantener las distancias, para poner silencio de por medio, para hacer el vacío en torno a nuestras palabras, las cuales, por el mero hecho de ser plasmadas, acceden a una existencia soberana, plena, más allá de que sean o no atendidas por un destinatario más o menos concreto. LEER MÁS
LA AMARGA LUCIDEZ DE SÁNCHEZ FERLOSIO
Es la de Ferlosio la viva estampa de la renuncia. Ya hace mucho que se ha rendido. "Lo malo de los viejos es que ya no cambiamos de opinión", admite, aunque no se acaba de entender qué tiene de sabio empecinarse en el error. Y es que Ferlosio encarna a la perfección cierta forma de ejercer la hispanidad, que él mismo retrata con certeras palabas: "La desazón española no ha conocido nunca la esperanza, en su lugar pone una aceptación eternamente rencorosa". Rencoroso es el pecio ferlosiano, lúgubre, airado, sin ironía, crispado hasta lo cómico. LEER MÁS
EL ÁRBOL EN LA POESÍA ESPAÑOLA DEL SIGLO XX
Libros al Albur acaba de publicar la antología El árbol en la poesía española del siglo XX, un ebook gratuito que incluye decenas de poemas sobre esta bella temática. León Molina, el poeta y aforista cubano residente en España, ha escrito un emotivo prólogo como invitación a su lectura y disfrute, que reproducimos con la autorización del autor. LEER MÁS
EL HOMBRE QUE SE INVENTÓ A SÍ MISMO
Que Bukowski perseguía una idealización catártica de una existencia gris y hasta patética queda avalado en que se convirtió a sí mismo en personaje literario: en (anti)héroe de... ficción. Henry Chinaski, alter ego del autor, protagoniza algunas de sus obras más reputadas, en cuyo odre vierte con desparpajo todos los atributos que él mismo no se atrevía a encarnar en la vida de todos los días. Se presentaba como adalid de los desarrapados, las prostitutas y los mendigos, pero él era millonario. En su libro sobre el autor de Factótum, Juan Corredor concluye con palabras que no dejan lugar a dudas: "Su afición a la marginalidad es impostada y está respaldada por una cuenta de ahorros". LEER MÁS
LA POESÍA COMO CELEBRACIÓN
El poeta Antonio Reinoso Lamela se pregunta: "¿Tiene que cantar siempre el poeta a una pérdida, a lo que le falta para estar completo, a lo que está a punto de llegar pero nunca se nos da totalmente? ¿Tiene que ser la gran poesía una elegía, un lamento, o por lo menos un canto a la ausencia, a lo que se nos escapa? Hay ejemplos de lo contrario. El mejor Jorge Guillén, el de Cántico, que hace de la poesía un canto a la vida perfecta, a la absoluta belleza de todo". LEER MÁS
LA ÚLTIMA METAMORFOSIS
DE OSCAR WILDE
La carta que Oscar Wilde le escribe a Alfred Douglas desde la cárcel de Reading es más un breviario de espiritualidad más que una confesión, un sudario o una premonición biográfica. Aquí nos importa ahora su naturaleza de refutación de un equívoco, de patada a la superfluidad de cierto decadentismo de escaparate, más que su incidencia como punto de inflexión de un mito literario (y, como tal, condenado a la pequeñez de los manuales y de los fieles). El De profundis es un hito por lo que tiene de desafío de la tradición balsámica del arte: es, ante todo, un evangelio profano. LEER MÁS
JUAN RULFO : EL SILENCIO COMO OBRA DE ARTE
Tras publicar dos libros decisivos para la historia de la literatura hispanoamericana, Juan Rulfo amasó durante años su silencio. Lo trabajó como hacen los escultores con el mármol, la piedra o la madera. Lo trasladó a sus fotografías. Y así siguió trabajando su silencio hasta que llegó a ese punto en el cual el silencio se volvió algo impreciso como una luz que todo lo oscurece, pero ya Rulfo estaba en esa orilla donde nada importaba y donde el silencio fue a larga una obra de arte sólida en su fugacidad, una obra de arte que le robó tiempo a su escritura y a su vida. LEER MÁS
CONRAD Y EL SENTIDO DE LA AVENTURA
En una época como la nuestra, hombres del siglo XXI, que hemos despreciado (salvo contados casos) la dimensión existencial de la aventura, que se reduce en nuestros días a una parodia grosera en los llamados deportes de riesgo y los programas de las agencias de viajes organizados, volver a leer los relatos marineros (de entre los que destacan con fuerza La línea de sombra, Tifón o El corazón de las tinieblas) del escritor polaco, nacionalizado británico, Joseph Conrad significa recuperar una tesitura espiritual para la que, tal vez, ya hemos perdido toda esperanza. LEER MÁS
¿QUÉ SENTIDO TIENE LA LITERATURA?
Tal vez, la literatura es el único espacio donde las contradicciones no se crean ni se destruyen, sino que conviven y se transforman ante nuestros asustados ojos. La literatura es el deseo de nunca acabar. Pero, para llegar a este espacio indómito y fundacional, no basta con la pluma, la máquina de escribir o el ordenador personal; tampoco nos asegura el acceso a él una imaginación desgarrada, una habilidad técnica o un cierto compromiso con la tradición consolidada. No: para abarcar la raíz de la palabra y beber de las aguas de la inspiración original hay que dar un paso más allá. Pero... ¿hacia dónde? LEER MÁS
RILKE: PENSAR LO HONDO
Las Cartas a un joven poeta pueden ser consideradas un auténtico tratado de formación que, lejos de toda artificiosidad, acomete, en las diez misivas enviadas a F. Xaver Kappus, la tarea de tomarse en serio la vida, de hincar la existencia en lo profundo que constituye y nutre al ser humano. Cuando hoy las aristas del existir son permanentemente limadas, ocultadas y depreciadas, la lectura de este epistolario provoca ese vértigo del que habla la octava carta a propósito de algo que, en la actualidad, tampoco y tan poco queremos oír: “Estamos solos”. Gracias a ello descubriremos lo que el poeta llama “vida propia”, “nuestro destino”, que sólo puede develarse tras acceder a lo hondo pensado en su radicalidad… LEER MÁS
EL KIERKEGAARD MÁS BREVE
Contrario a los sistemas filosóficos establecidos en su época, principalmente el de Hegel, Kierkegaard pensaba que la razón que pretendían imponer perjudicaba a la creatividad y singularidad de la persona, por lo que optó por pronunciarse en sentido opuesto, enfrentándose a la dificultad y manteniendo vivo el espíritu a través de la ironía. Conocido como el «Sócrates del Norte», se servía de ésta, al igual que el filósofo de la antigua Grecia, como un arma contra el todo normativismo. Se acaba de publicar una nueva traducción de Diapsálmata donde podemos disfrutar del Kierkegaard más breve en unas páginas llenas de encanto y humor. LEER MÁS
LOS TRANQUILOS DIARIOS DE HANDKE
El escritor Peter Handke, reconocido propietario de una prosa esencialista que algunos han calificado de alambicada, es también un valioso autor de diarios. Dos libros son el testimonio: El peso del mundo (1979) y la Historia del lápiz (1982). Se trata de textos en propiedad infinitos, pues su responsable reconoce que "no pueden tener final". Escritos simultáneamente a los hechos narrados, son el "reportaje en directo de una conciencia": incluso podríamos decir que son los únicos libros de la historia literaria que no existen antes ni después de ellos mismos, y el hecho de que los podamos leer no es más que la confirmación de esta idea extraña, casi monstruosa. LEER MÁS
EL POETA Y EL ESPEJO DEL TIEMPO
Si Hölderlin aseguró que "lo que dura, lo fundan los poetas", es probable que Andrés Trapiello se conformase con una versión menos ambiciosa (o presuntuosa) de esta frase, tal vez: lo que dura, lo reflejan los poetas. Ante todo, porque lo captan, lo acogen y, sólo después de cerciorarse de su carácter genuino, cierto, lo vuelcan en un papel en versos fijos, pulidos y esplendorosos. ¿El poeta como un copista? Tampoco tan poco, pero casi que así. En Segunda oscuridad encontramos abundantes ejemplos de ello. LEER MÁS
ENTREVISTA A CLAUDIO MAGRIS
El reconocido autor de obras como El Danubio reflexiona en esta entrevista sobre los fundamentos de la cultura europea, cuyo núcleo fuerte es la apuesta por el individuo frente a la totalidad indistinta. El escritor apuesta por abrir esta tradición al diálogo con otras culturas, pero sin olvidar este rasgo distintivo, el cual la ha hecho atractiva a los ojos del mundo entero y la ha convertido en destino de peregrinación masiva. En cuanto a la reivindicación de otras voces sepultadas por el canon generalmente admitido, afirma que "hay que potenciar el descubrimiento de las minorías culturales, sin caer en el culto de lo excéntrico que rechaza la cultura heredada por el simple hecho de haberse visto sostenida por el consenso". LEER MÁS
FIODOR DOSTOIEVSKI Y LA VOCACIÓN DE DESVÍO
En Memorias del subsuelo, el autor ruso cede la voz narrativa a una sombra pálida, fosforescente, que relata la teoría y la práctica de la infamia. Confinada en el gulag de su lucidez, infectada por el exceso de inteligencia ("ser demasiado consciente es una enfermedad"), la voz desgrana uno a uno todos los argumentos que refutan desde la raíz la Escatología del Bien que, antes y ahora, chantajea a los hombres desde el nacimiento: triunfa y serás feliz, vence y serás hombre. Pero, como el propio autor se pregunta, de una forma retórica: "¿No habrá en el mundo algo que sea, en efecto, más preciado para cada hombre que sus mejores beneficios?" LEER MÁS
TÉCNICAS DEL AURA
La depauperación de la obra de arte, disuelto su contenido de verdad y exiliada su función a fetiche inesencial de consumo masivo, configura la situación histórica que describe Benjamin en un texto publicado en 1936, en pleno auge de los fascismos. En nuestros días, cuando ha concluido el programa de ocupación total de lo real por parte de la ciencia, las reflexiones de Walter Benjamin se antojan de gran actualidad. LEER MÁS
MÁS ALLÁ DE LA POSTMODERNIDAD
El filósofo Gonçal Mayos, profesor de la Universidad de Barcelona, afirma en este texto (que forma parte de su libro Macrofilosofía de la Modernidad) que en estos sombríos tiempos posmodernos, la necesidad de superar el nihilismo es hoy, sin duda, mayor que nunca antes. La Postmodernidad no será realmente post-Modernidad si no traspasa finalmente el nihilismo e inicia un nuevo comienzo antinihilista. Como ya escribía Nietzsche, "una filosofía experimental anticipa a modo de ensayo las posibilidades del nihilismo radical, sin que con ello se quiera decir que se limite a un no, a una negación, a una voluntad de negar". LEER MÁS
EL PARÍS ABSOLUTO DE CHARLES BAUDELAIRE
El París de Baudelaire es un territorio absoluto donde todo empieza y todo acaba, un grácil y eterno bucle que dibuja el itinerario donde los extremos se tocan, el cielo y el infierno, lo sublime del ideal y el tedio del spleen. París es el alfa y el omega de la metrópolis occidental, los extremos entre los que discurre el pensamiento y la palabra, la cabeza y la cola de una continuidad inseparable que seduce a la inteligencia para impedir que la abandone, la habitación doble que comunica el aquí-y-ahora del hombre con el nunca-y-jamás del símbolo, la capital de un continente oscuro donde todo parece posible porque nada es como parece, sino puede que todo lo contrario. LEER MÁS
THOMAS WOLFE: RETRATO DEL ESCRITOR FLUVIAL
El escritor fluvial es, a diferencia del escritor insular, un titán que se empeña en golpear los tobillos de Zeus a pesar de yacer en el suelo con los brazos destrozados. Poseído por una furia escritora que se asemeja, en ciertos momentos, a la pura escritura automática, Thomas Wolfe constata que su problema no es otro que la "falta de proporción" de su propio cometido. En efecto, al escritor le ha sido franqueado el paso a un reino indómito donde las palabras se le mostraban desnudas y todas a un tiempo; pero, de nuevo en la tierra, en el tiempo de los hombres, vuelve a ser un simple mortal, el traductor de vuelo corto de un texto ilegible que permanece en la memoria, pudriéndose al contacto del mundo, de las editoriales y los premios literarios. LEER MÁS
EL FUTURO DE LOS LIBROS
El libro en papel es un objeto que tú adquieres y atesoras, que comparte contigo la cama, los días buenos y te hace menos infeliz en los malos. Es un amigo siempre a mano, lleno de notas que te recuerdan lo que pensabas hace veinte años. En cambio, es algo que habría que ir olvidando, como olvidamos los coches tirados por caballos y como también tendremos que ir olvidando el concepto de soberanía. Si por mí fuera, trataría de impedirlo; pero sería inútil. El hombre es presa de las llamadas nuevas tecnologías, que barren con todo lo concebido a escala humana. Es el mundo que viene, que ojalá no sea el de Terminator. LEER MÁS
Que Bukowski perseguía una idealización catártica de una existencia gris y hasta patética queda avalado en que se convirtió a sí mismo en personaje literario: en (anti)héroe de... ficción. Henry Chinaski, alter ego del autor, protagoniza algunas de sus obras más reputadas, en cuyo odre vierte con desparpajo todos los atributos que él mismo no se atrevía a encarnar en la vida de todos los días. Se presentaba como adalid de los desarrapados, las prostitutas y los mendigos, pero él era millonario. En su libro sobre el autor de Factótum, Juan Corredor concluye con palabras que no dejan lugar a dudas: "Su afición a la marginalidad es impostada y está respaldada por una cuenta de ahorros". LEER MÁS
LA POESÍA COMO CELEBRACIÓN
El poeta Antonio Reinoso Lamela se pregunta: "¿Tiene que cantar siempre el poeta a una pérdida, a lo que le falta para estar completo, a lo que está a punto de llegar pero nunca se nos da totalmente? ¿Tiene que ser la gran poesía una elegía, un lamento, o por lo menos un canto a la ausencia, a lo que se nos escapa? Hay ejemplos de lo contrario. El mejor Jorge Guillén, el de Cántico, que hace de la poesía un canto a la vida perfecta, a la absoluta belleza de todo". LEER MÁS
LA ÚLTIMA METAMORFOSIS
DE OSCAR WILDE
La carta que Oscar Wilde le escribe a Alfred Douglas desde la cárcel de Reading es más un breviario de espiritualidad más que una confesión, un sudario o una premonición biográfica. Aquí nos importa ahora su naturaleza de refutación de un equívoco, de patada a la superfluidad de cierto decadentismo de escaparate, más que su incidencia como punto de inflexión de un mito literario (y, como tal, condenado a la pequeñez de los manuales y de los fieles). El De profundis es un hito por lo que tiene de desafío de la tradición balsámica del arte: es, ante todo, un evangelio profano. LEER MÁS
JUAN RULFO : EL SILENCIO COMO OBRA DE ARTE
Tras publicar dos libros decisivos para la historia de la literatura hispanoamericana, Juan Rulfo amasó durante años su silencio. Lo trabajó como hacen los escultores con el mármol, la piedra o la madera. Lo trasladó a sus fotografías. Y así siguió trabajando su silencio hasta que llegó a ese punto en el cual el silencio se volvió algo impreciso como una luz que todo lo oscurece, pero ya Rulfo estaba en esa orilla donde nada importaba y donde el silencio fue a larga una obra de arte sólida en su fugacidad, una obra de arte que le robó tiempo a su escritura y a su vida. LEER MÁS
CONRAD Y EL SENTIDO DE LA AVENTURA
En una época como la nuestra, hombres del siglo XXI, que hemos despreciado (salvo contados casos) la dimensión existencial de la aventura, que se reduce en nuestros días a una parodia grosera en los llamados deportes de riesgo y los programas de las agencias de viajes organizados, volver a leer los relatos marineros (de entre los que destacan con fuerza La línea de sombra, Tifón o El corazón de las tinieblas) del escritor polaco, nacionalizado británico, Joseph Conrad significa recuperar una tesitura espiritual para la que, tal vez, ya hemos perdido toda esperanza. LEER MÁS
¿QUÉ SENTIDO TIENE LA LITERATURA?
Tal vez, la literatura es el único espacio donde las contradicciones no se crean ni se destruyen, sino que conviven y se transforman ante nuestros asustados ojos. La literatura es el deseo de nunca acabar. Pero, para llegar a este espacio indómito y fundacional, no basta con la pluma, la máquina de escribir o el ordenador personal; tampoco nos asegura el acceso a él una imaginación desgarrada, una habilidad técnica o un cierto compromiso con la tradición consolidada. No: para abarcar la raíz de la palabra y beber de las aguas de la inspiración original hay que dar un paso más allá. Pero... ¿hacia dónde? LEER MÁS
RILKE: PENSAR LO HONDO
EL KIERKEGAARD MÁS BREVE
Contrario a los sistemas filosóficos establecidos en su época, principalmente el de Hegel, Kierkegaard pensaba que la razón que pretendían imponer perjudicaba a la creatividad y singularidad de la persona, por lo que optó por pronunciarse en sentido opuesto, enfrentándose a la dificultad y manteniendo vivo el espíritu a través de la ironía. Conocido como el «Sócrates del Norte», se servía de ésta, al igual que el filósofo de la antigua Grecia, como un arma contra el todo normativismo. Se acaba de publicar una nueva traducción de Diapsálmata donde podemos disfrutar del Kierkegaard más breve en unas páginas llenas de encanto y humor. LEER MÁS
LOS TRANQUILOS DIARIOS DE HANDKE
El escritor Peter Handke, reconocido propietario de una prosa esencialista que algunos han calificado de alambicada, es también un valioso autor de diarios. Dos libros son el testimonio: El peso del mundo (1979) y la Historia del lápiz (1982). Se trata de textos en propiedad infinitos, pues su responsable reconoce que "no pueden tener final". Escritos simultáneamente a los hechos narrados, son el "reportaje en directo de una conciencia": incluso podríamos decir que son los únicos libros de la historia literaria que no existen antes ni después de ellos mismos, y el hecho de que los podamos leer no es más que la confirmación de esta idea extraña, casi monstruosa. LEER MÁS
EL POETA Y EL ESPEJO DEL TIEMPO
Si Hölderlin aseguró que "lo que dura, lo fundan los poetas", es probable que Andrés Trapiello se conformase con una versión menos ambiciosa (o presuntuosa) de esta frase, tal vez: lo que dura, lo reflejan los poetas. Ante todo, porque lo captan, lo acogen y, sólo después de cerciorarse de su carácter genuino, cierto, lo vuelcan en un papel en versos fijos, pulidos y esplendorosos. ¿El poeta como un copista? Tampoco tan poco, pero casi que así. En Segunda oscuridad encontramos abundantes ejemplos de ello. LEER MÁS
ENTREVISTA A CLAUDIO MAGRIS
El reconocido autor de obras como El Danubio reflexiona en esta entrevista sobre los fundamentos de la cultura europea, cuyo núcleo fuerte es la apuesta por el individuo frente a la totalidad indistinta. El escritor apuesta por abrir esta tradición al diálogo con otras culturas, pero sin olvidar este rasgo distintivo, el cual la ha hecho atractiva a los ojos del mundo entero y la ha convertido en destino de peregrinación masiva. En cuanto a la reivindicación de otras voces sepultadas por el canon generalmente admitido, afirma que "hay que potenciar el descubrimiento de las minorías culturales, sin caer en el culto de lo excéntrico que rechaza la cultura heredada por el simple hecho de haberse visto sostenida por el consenso". LEER MÁS
FIODOR DOSTOIEVSKI Y LA VOCACIÓN DE DESVÍO
En Memorias del subsuelo, el autor ruso cede la voz narrativa a una sombra pálida, fosforescente, que relata la teoría y la práctica de la infamia. Confinada en el gulag de su lucidez, infectada por el exceso de inteligencia ("ser demasiado consciente es una enfermedad"), la voz desgrana uno a uno todos los argumentos que refutan desde la raíz la Escatología del Bien que, antes y ahora, chantajea a los hombres desde el nacimiento: triunfa y serás feliz, vence y serás hombre. Pero, como el propio autor se pregunta, de una forma retórica: "¿No habrá en el mundo algo que sea, en efecto, más preciado para cada hombre que sus mejores beneficios?" LEER MÁS
TÉCNICAS DEL AURA
La depauperación de la obra de arte, disuelto su contenido de verdad y exiliada su función a fetiche inesencial de consumo masivo, configura la situación histórica que describe Benjamin en un texto publicado en 1936, en pleno auge de los fascismos. En nuestros días, cuando ha concluido el programa de ocupación total de lo real por parte de la ciencia, las reflexiones de Walter Benjamin se antojan de gran actualidad. LEER MÁS
MÁS ALLÁ DE LA POSTMODERNIDAD
El filósofo Gonçal Mayos, profesor de la Universidad de Barcelona, afirma en este texto (que forma parte de su libro Macrofilosofía de la Modernidad) que en estos sombríos tiempos posmodernos, la necesidad de superar el nihilismo es hoy, sin duda, mayor que nunca antes. La Postmodernidad no será realmente post-Modernidad si no traspasa finalmente el nihilismo e inicia un nuevo comienzo antinihilista. Como ya escribía Nietzsche, "una filosofía experimental anticipa a modo de ensayo las posibilidades del nihilismo radical, sin que con ello se quiera decir que se limite a un no, a una negación, a una voluntad de negar". LEER MÁS
EL PARÍS ABSOLUTO DE CHARLES BAUDELAIRE
El París de Baudelaire es un territorio absoluto donde todo empieza y todo acaba, un grácil y eterno bucle que dibuja el itinerario donde los extremos se tocan, el cielo y el infierno, lo sublime del ideal y el tedio del spleen. París es el alfa y el omega de la metrópolis occidental, los extremos entre los que discurre el pensamiento y la palabra, la cabeza y la cola de una continuidad inseparable que seduce a la inteligencia para impedir que la abandone, la habitación doble que comunica el aquí-y-ahora del hombre con el nunca-y-jamás del símbolo, la capital de un continente oscuro donde todo parece posible porque nada es como parece, sino puede que todo lo contrario. LEER MÁS
THOMAS WOLFE: RETRATO DEL ESCRITOR FLUVIAL
El escritor fluvial es, a diferencia del escritor insular, un titán que se empeña en golpear los tobillos de Zeus a pesar de yacer en el suelo con los brazos destrozados. Poseído por una furia escritora que se asemeja, en ciertos momentos, a la pura escritura automática, Thomas Wolfe constata que su problema no es otro que la "falta de proporción" de su propio cometido. En efecto, al escritor le ha sido franqueado el paso a un reino indómito donde las palabras se le mostraban desnudas y todas a un tiempo; pero, de nuevo en la tierra, en el tiempo de los hombres, vuelve a ser un simple mortal, el traductor de vuelo corto de un texto ilegible que permanece en la memoria, pudriéndose al contacto del mundo, de las editoriales y los premios literarios. LEER MÁS
ENTREVISTA A NATALIA LITVINOVA
"La poesía no me pregunta cuándo ni cómo. Muchas veces es inoportuna y brota con una forma que no sé controlar y tampoco quisiera controlarla. Luego viene el trabajo exhaustivo de corrección, de pulido y tallado, como los artesanos con sus artesanías". Dueña de una voz madura y propia; creadora de atmósfera magnéticas y seductiva; bella, joven, culta, leída y vivida... Natalia Litvinova llega a España. Tras demostrar, en sus poemas y traducciones de poetas rusos, que posee lo que hay que poseer para hablar como hay que hablar, y dejarlo por escrito, publica Esteparia, el primero de sus libros que el lector español podrá adquirir. LEER MÁS
"La poesía no me pregunta cuándo ni cómo. Muchas veces es inoportuna y brota con una forma que no sé controlar y tampoco quisiera controlarla. Luego viene el trabajo exhaustivo de corrección, de pulido y tallado, como los artesanos con sus artesanías". Dueña de una voz madura y propia; creadora de atmósfera magnéticas y seductiva; bella, joven, culta, leída y vivida... Natalia Litvinova llega a España. Tras demostrar, en sus poemas y traducciones de poetas rusos, que posee lo que hay que poseer para hablar como hay que hablar, y dejarlo por escrito, publica Esteparia, el primero de sus libros que el lector español podrá adquirir. LEER MÁS
EL FUTURO DE LOS LIBROS
ENTREVISTA A REYNALDO LUGO
Reynaldo Lugo, escritor cubano afincado en España, tiene su biografía ornada de peripecias: veterano de la guerra de Angola, en la que participó como oficial del ejército de su país; realizador de programas televisivos; director de revistas de temáticas diversas; periodista, bloguero, pero, sobre todo, novelista, autor de varios títulos y, sobre todo, de Palmeras de sangre, con la que obtuvo un notable éxito en España. Ha recibido recientemente un premio en la Semana Negra de Gijón y trabaja sin cesar en sus nuevos proyectos, con los que, de nuevo, espera sorprender al lector con su prosa ágil y sus tramas sólidas y bien trabadas. LEER MÁS
¿QUÉ FUE DEL PENSAMIENTO DÉBIL?
.
Todo el mundo cree saber lo que quiere decir cuando acusa a alguien de débil: significa tanto como descartarlo de la circulación por pusilánime, abúlico, falto de carácter y, en definitiva, incapaz de regirse por sí mismo. Por ello, la publicación de un libro de filosofía que se llamaba a sí mismo así, débil (Il pensiero debole, Feltrinelli, 1983, traducción española en Cátedra, 1988) no dejó de causar cierto revuelo entre los círculos más inquietos del pensamiento europeo. Aún más, si cabe, al comprobar que entre los colaboradores del volumen se encontraban autores tan poco sospechosos de incapacidad como el semiólogo y novelista Umberto Eco, el historiador del pensamiento y la estética Gianni Vattimo y el especialista en lenguajes articiales y filosofía del lenguaje Diego Marconi. Pero todo tenía su explicación. LEER MÁS
LA CONDICIÓN JÁNICA DE LA MODERNIDAD
La Modernidad no se agota en el cumplimiento del programa ilustrado de conquista del mundo por la razón, aunque bien es cierto que ésta es su inquietud más visible. Por el contrario, aquello que le es de algún modo consustancial consiste precisamente en la imposibilidad efectiva de su consumación (y la noción de progreso es la coartada que pospone la clausura del proceso al infinito). Imaginemos entonces que la esencia de la Modernidad consista, no en la iluminación de las causas de lo real, sino en su escisión autoproducida: que la constitución de sus objetos indujera igualmente la nulidad de sus propósitos conquistadores en forma de antagonismo indisoluble. En tal caso, la Modernidad deviene la apertura del pensamiento a la oscilación de los conceptos (todo-nada, universal-particular, racional-irracional), de manera que todo incremento de la determinación lo es también de la atracción por lo indeterminado, la constatación de un fondo impreciso que se sustrae al cálculo. LEER MÁS
.
Todo el mundo cree saber lo que quiere decir cuando acusa a alguien de débil: significa tanto como descartarlo de la circulación por pusilánime, abúlico, falto de carácter y, en definitiva, incapaz de regirse por sí mismo. Por ello, la publicación de un libro de filosofía que se llamaba a sí mismo así, débil (Il pensiero debole, Feltrinelli, 1983, traducción española en Cátedra, 1988) no dejó de causar cierto revuelo entre los círculos más inquietos del pensamiento europeo. Aún más, si cabe, al comprobar que entre los colaboradores del volumen se encontraban autores tan poco sospechosos de incapacidad como el semiólogo y novelista Umberto Eco, el historiador del pensamiento y la estética Gianni Vattimo y el especialista en lenguajes articiales y filosofía del lenguaje Diego Marconi. Pero todo tenía su explicación. LEER MÁS
LA CONDICIÓN JÁNICA DE LA MODERNIDAD
La Modernidad no se agota en el cumplimiento del programa ilustrado de conquista del mundo por la razón, aunque bien es cierto que ésta es su inquietud más visible. Por el contrario, aquello que le es de algún modo consustancial consiste precisamente en la imposibilidad efectiva de su consumación (y la noción de progreso es la coartada que pospone la clausura del proceso al infinito). Imaginemos entonces que la esencia de la Modernidad consista, no en la iluminación de las causas de lo real, sino en su escisión autoproducida: que la constitución de sus objetos indujera igualmente la nulidad de sus propósitos conquistadores en forma de antagonismo indisoluble. En tal caso, la Modernidad deviene la apertura del pensamiento a la oscilación de los conceptos (todo-nada, universal-particular, racional-irracional), de manera que todo incremento de la determinación lo es también de la atracción por lo indeterminado, la constatación de un fondo impreciso que se sustrae al cálculo. LEER MÁS